¡DAR GRACIAS!

¡DAR GRACIAS!

Cada vez que veo la historia de los diez leprosos en las Escrituras, pienso en que tan hermosa fue la actitud de ese samaritano que decidió agradecer al Señor Jesús por el maravilloso oráculo realizado en su vida.

Podemos aprender al menos dos lecciones del pasaje:

1.Jesús espera nuestra gratitud
Note que Jesús se sorprendió cuando solo una persona, de los diez sanados, regresó para agradecerle por haber sido sanado de esa horrible enfermedad.
La verdad es que el Señor espera nuestra gratitud, Él evalúa cuán agradecidos estamos por todas las innumerables bendiciones que recibimos todos los días, y un corazón agradecido debe ser algo que siempre busquemos, porque eso agrada a nuestro Señor.

2.Agradecimiento significa cambio de rumbo
Tan pronto como el hombre obedeció el mandato del Señor, ¡fue sanado! Luego, en lugar de ir a ver al sacerdote, a su familia oa cualquier otra persona, cambió su dirección hacia Su Salvador.
Un corazón agradecido camina hacia Dios. Una vida llena de agradecimiento quiere estar cerca del Maestro, y la mejor manera de mostrar agradecimiento por todo lo que el Señor ha hecho es estar conectados con Él, incluso si todo el curso de nuestra existencia tiene que cambiar. Cuando estamos agradecidos, nuestras prioridades lo demuestran.

Cuando pensamos en lo desafiante que ha sido el año 2020, es fácil olvidar toda la bondad y fidelidad que también hemos experimentado de parte de Dios. ¿Quién prevería en el último Día de Acción de Gracias de 2019 que afrontaríamos un año tan diferente?
Es por eso que hoy nuestro enfoque será de optimismo y celebración por ser hijos e hijas de Dios, redimidos por la sangre de Su único Hijo, y con la seguridad de que pronto estaremos con Él para siempre, en un perfecto, sin pecado y maravilloso mundo.

Deseando paz, salud y muchas bendiciones a su cuerpo y alma,
Pr. Joshua Mateíne

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